Nuestra propuesta de transparencia en Sinaloa

Compartimos el texto íntegro de la ponencia presentada por la directora de Iniciativa Sinaloa, Norma Sánchez, en el panel "Armonización en materia Transparencia y Acceso a la Información en las entidades federativas" organizado por el Gobierno de Sinaloa como parte de la 5ta Semana de la Transparencia y Rendición de Cuentas. Texto íntegro: En los últimos años, las palabras “reformas de transparencia” han ocupado planas de periódico, charlas de sobremesas, y agendas de Gobiernos, Congresos y organizaciones de la sociedad civil. En las calles, por su lado, los ciudadanos hablan de corrupción, crisis de confianza hacia nuestras instituciones y violaciones a derechos humanos. Un sinfín encuestas y diagnósticos así lo demuestran. Hoy en este panel quiero dejar un mensaje en nombre de la organización civil para la cual trabajo, Iniciativa Sinaloa, la cual desde su fundación hace 5 años, ha perseguido impulsar -a través de la investigación especializada- las mejores prácticas en nuestras instituciones públicas para que éstas se conviertan en reales promotoras del ejercicio de un derecho humano, el de Acceso a la Información Pública. Ya han pasado más de 10 años desde que Sinaloa aprobó una Ley de Acceso. Esta entidad puede presumir haber sido la primera en aprobar un marco normativo en materia de transparencia. Pero después de esa década, Sinaloa ya no es el mismo, como tampoco es el mismo el país que habitamos. Hechos como el de Ayotzinapa, Tlatlaya, y otros que no han impactado mediáticamente tanto como los primeros, como es el caso de los bebés muertos recientemente en la clínica del IMSS de Culiacán, son una clara muestra de que algo no está funcionando. Hay un punto en común de todos estos hechos y se llama Corrupción. No es extraño que en la reunión pasada que sostuvimos organizaciones de la sociedad civil de 14 estados del país, para acordar el rol que jugaremos durante la Cumbre Global de la Alianza para el Gobierno Abierto que se celebrará la próxima semana en el DF, una de las principales preocupaciones fue el tema Corrupción. Y concluimos. La reforma en materia de transparencia no logrará atenuar la crisis de confianza ciudadana hacia las instituciones públicas si no logramos establecer mecanismos de control efectivo al gasto público y al desempeño de nuestros gobernantes, que se traduzcan en una mejor calidad de vida. La reforma en materia de transparencia en Sinaloa debe atender, principalmente, las siguientes vertientes: -Garantizar el fortalecimiento del órgano garante, dotando de mecanismos de participación ciudadana al proceso de designación de los comisionados. En el proceso pasado se instaló un Comité Ciudadano de Acompañamiento, pero éste nunca tuvo un rol claro qué atender, ni tampoco se le reconoció como un ente capaz de proponer un instrumento de evaluación para los aspirantes. Esto también debe quedar establecido en la reforma. -Medidas claras de apremio para aquellos funcionarios que limiten el acceso a la información. Sanciones aplicadas desde el órgano garante e incluso de manera oficiosa. -Privilegiar la transparencia proactiva sobre la reactiva. El indicador de éxito no debe seguir siendo el número de solicitudes presentadas vía Infomex por ciudadanos (lo cual solo te habla, en la mayoría de los casos, de que las entidades públicas no están cumpliendo con su obligación), sino que debe ser la capacidad de acción y reacción que demuestren los comisionados de la CEAIP para lograr que todos los sujetos obligados, incluidas las universidades públicas, partidos políticos, sindicatos y fideicomisos de Sinaloa, cumplan con sus obligaciones de transparencia y rendición de cuentas. Se debe reforzar la promoción y difusión de los casos de éxito, pero también es importante ver qué pasa con aquellos funcionarios que no están cumpliendo con la responsabilidad de difundir la información mínima de oficio. El proceso de reforma en materia de transparencia debe poner en marcha prácticas de un Parlamento Abierto. Congreso, órgano garante y organizaciones de la sociedad civil trabajando y tomando acuerdos. La armonización en materia de transparencia en Sinaloa debe garantizar la apertura del propio Congreso estatal. El Congreso de Sinaloa sigue estando en los niveles más bajos de transparencia de información presupuestal y administrativa de acuerdo al diagnóstico elaborado por la Alianza para el Parlamento Abierto, un grupo de organizaciones de la sociedad civil en cuya agenda están los 34 cuerpos legislativos del país. La reforma en materia de transparencia de Sinaloa debe partir de un proyecto integral de reforma de estado, que englobe: -Una Ley de Protección Datos Personales que garantice la salvaguarda del derecho a preservar la información personal de las personas -Una Ley de Archivos que permita avanzar hacia la apertura de datos digitales, la eficiente rendición de cuentas, y la eliminación del costo de las copias con información pública que actualmente aplica el Gobierno. -Una Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos que garantice sanciones justas de acuerdo a las faltas cometidas por los funcionarios. -Y una Ley Anticorrupción que provea de mecanismos más claros de control. Si Sinaloa quiere nuevamente hacer historia como lo hizo hace 12 años cuando aprobó su Ley de Acceso, deberá empezar por preguntarse hasta dónde quiere llegar. Una armonización será suficiente solo si el marco normativo provee de herramientas suficientes para lograr que los funcionarios cumplan con su responsabilidades, o sean sancionados si no. Una ley debe ser el punto de partida de un cambio de mentalidad de nuestros gobernantes y diputados, para lograr que el papel se convierta en mejores prácticas que permitan reducir la opacidad y corrupción, y con ellos alcanzar un mejor nivel de vida ciudadano. Muchas gracias.

Mazatlán, Sinaloa 21 de octubre del 2015

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